Lionel Messi es, sin duda, uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol.
El astro argentino ha deslumbrado al mundo con su talento, velocidad, regate, visión, definición y su liderazgo.
Con la camiseta del Barcelona, ha ganado todo lo que se puede ganar a nivel de clubes: 10 Ligas, 8 Copas del Rey, 4 Champions League, 3 Mundiales de Clubes y 6 Balones de Oro, entre otros muchos títulos y récords.
Con la camiseta de la selección argentina, también ha hecho historia, al ser el máximo goleador, el segundo jugador con más partidos y el capitán del equipo que ganó la Copa América 2021 y el Mundial 2022, rompiendo una sequía de 28 y 36 años, respectivamente.
A pesar de ello, hay un aspecto de su carrera que llama la atención: Lionel Messi pese a ser argentino de nacimiento, nunca jugó profesionalmente en el fútbol argentino.
El rosarino se fue a España con apenas 13 años, y desde entonces ha desarrollado toda su trayectoria en el Barcelona, sin pasar por ningún club de su país natal.
Sin embargo, en los últimos tiempos, Messi ha jugado cuatro partidos oficiales contra clubes de su país natal con la camiseta azulgrana y rosa .
¿Cómo le fue en esos duelos? ¿Qué equipos enfrentó? ¿Qué goles marcó? A continuación, veremos la historia de Messi vs. equipos argentinos, desde el primero hasta el último.
El Sueño de Newell’s
Messi nació el 24 de junio de 1987 en Rosario, la tercera ciudad más poblada de Argentina y una de las más futboleras. Desde pequeño, Messi se enamoró del fútbol y empezó a jugar en el club Grandoli, donde su abuela Celia lo llevaba a ver los partidos.
A los seis años, se incorporó a las divisiones inferiores de Newell’s Old Boys, el club de sus amores, donde se destacó por su habilidad y su capacidad goleadora.
Messi soñaba con jugar en el primer equipo de Newell’s, y con seguir los pasos de su ídolo, Diego Maradona, que había jugado en la Lepra en 1993.
Sin embargo, su sueño se vio truncado por un problema de salud: Messi padecía un déficit de la hormona del crecimiento, que afectaba su desarrollo físico y requería un tratamiento costoso que su familia no podía afrontar.
Newell’s se comprometió a pagar el tratamiento de Messi, pero no cumplió con su palabra.
Ante esta situación, la familia de Messi buscó otras alternativas, y encontró la solución en el Barcelona, que se interesó por el joven talento y le ofreció hacerse cargo de su tratamiento y de su formación futbolística.
Messi convenció al Barcelona con su juego, y firmó su primer contrato con el club en una servilleta, donde el director deportivo Carles Rexach se comprometió a ficharlo.
Messi se instaló en La Masía, la residencia de los jóvenes jugadores del Barcelona, donde continuó su tratamiento y su aprendizaje. A los 16 años, debutó en el primer equipo, y a los 17, marcó su primer gol.
A lo largo de su carrera con el Barcelona, Lio ha sido una fuerza dominante en la Liga Española y la Liga de Campeones de la UEFA, acumulando innumerables títulos y récords individuales.
Messi: su Deuda con el Fútbol Argentino
Messi reconoció en varias entrevistas que le hubiera gustado jugar en el fútbol argentino, y que siempre tuvo la ilusión de volver a Newell’s, el club que lo formó y que lleva en el corazón.
También admitió que las circunstancias de su vida y de su carrera lo alejaron de esa posibilidad, y que el fútbol argentino no le ofrecía las condiciones ni la seguridad que él necesitaba.
Sin embargo, Messi nunca dejó de amar al fútbol argentino, ni de defender los colores de la selección. Messi siempre volvió a la Albiceleste, y se convirtió en su líder y en su referente.
Siempre dio lo mejor de sí mismo, y se cargó al equipo al hombro en las situaciones más difíciles. Lio siempre buscó el título que le faltaba, y lo consiguió en la Copa América 2021 y en el Mundial 2022, donde fue el mejor jugador y el máximo goleador.
Lionel se ganó el respeto y el cariño de todos los argentinos, que lo reconocieron como el mejor jugador del mundo y como uno de los más grandes de la historia. Así, cumplió su sueño de ser campeón con la selección, y le dio una alegría inmensa a todo un país.
Messi contra Equipos Argentinos
El Debut contra Estudiantes
El primer partido de Messi contra un equipo argentino fue el 19 de diciembre de 2009, en la final del Mundial de Clubes disputada en Abu Dabi.
El rival era Estudiantes de La Plata, dirigido por Alejandro Sabella, que había eliminado al Pohang Steelers de Corea del Sur y al Al Ahli de Emiratos Árabes.
El Barcelona, por su parte, había vencido al Atlante de México y al Atlético Nacional de Colombia.
El partido fue muy disputado y parecía que se le escapaba al Barcelona, que se encontraba 1-0 abajo por el gol de Mauro Boselli a los 37 minutos.
Estudiantes defendía con orden y sacrificio, y el Barcelona no encontraba los espacios ni la claridad para generar peligro. Messi, que jugaba como falso nueve, estaba bien marcado y no podía desequilibrar.
Todo cambió en el minuto 89, cuando Pedro Rodríguez aprovechó un centro de Dani Alves para empatar el partido y forzar la prórroga.
En el tiempo extra, el Barcelona siguió dominando y buscando el gol del triunfo, que llegó en el minuto 110, gracias a Messi.
El argentino recibió un centro de Xavi y, con el pecho, mandó la pelota al fondo de la red, desatando la euforia de sus compañeros y la decepción de los rivales.
Fue el primer gol de Messi contra un equipo argentino, y uno de los más importantes de su carrera.
El Barcelona se proclamó campeón del mundo por primera vez en su historia, y Messi fue elegido el mejor jugador del torneo.
Sin embargo, el argentino no celebró su gol con alegría, sino con respeto y humildad, reconociendo el mérito de Estudiantes y el valor de su país.
La Revancha contra River
El segundo partido de Messi contra un equipo argentino fue el 20 de diciembre de 2015, en la final del Mundial de Clubes disputada en Yokohama.
El rival era River Plate, dirigido por Marcelo Gallardo, que había eliminado al Sanfrecce Hiroshima de Japón y al Guangzhou Evergrande de China. El Barcelona, por su parte, había vencido al América de México y al Al Sadd de Qatar.
El partido fue muy diferente al anterior, ya que el Barcelona fue muy superior a River desde el principio hasta el final.
El equipo catalán dominó el juego, la posesión y las ocasiones, y no dio opción al conjunto argentino, que apenas pudo inquietar al arquero Claudio Bravo.
Messi abrió el marcador a los 36 minutos, con un golazo de derecha tras controlar la pelota con el pecho dentro del área.
El argentino, que había estado en duda por una cólica renal, demostró su calidad y su compromiso, y volvió a marcar contra un equipo de su país.
Sin embargo, al igual que en 2009, Messi no festejó su gol con euforia, sino con mesura y respeto, pidiendo perdón a los hinchas de River que habían viajado a Japón.
El Barcelona amplió la ventaja con dos goles de Luis Suárez, a los 49 y a los 68 minutos, y selló una victoria contundente por 3-0.
El Barcelona se consagró campeón del mundo por tercera vez en su historia, y Messi fue elegido el mejor jugador del torneo por segunda vez.
El argentino, que recibió el trofeo de manos de Diego Maradona, se mostró feliz y orgulloso por el título, pero también agradecido y solidario con River y con su país.
El Amistoso contra Boca
El tercer partido de Messi contra un equipo argentino fue el 15 de agosto de 2018, en el trofeo Joan Gamper disputado en el Camp Nou.
El rival era Boca Juniors, dirigido por Guillermo Barros Schelotto, que había ganado la Superliga Argentina y la Supercopa Argentina. El Barcelona, por su parte, había ganado la Liga, la Copa del Rey y la Supercopa de España.
El partido fue un amistoso, pero tuvo un gran atractivo por la rivalidad histórica entre los dos clubes y por la presencia de Messi, que jugaba su primer partido como capitán del Barcelona tras la salida de Andrés Iniesta.
El argentino no defraudó y volvió a ser el protagonista del encuentro, que el Barcelona ganó con facilidad por 3-0.
Messi marcó el segundo gol del partido, a los 39 minutos, con un remate cruzado desde el borde del área, tras una buena combinación con Malcom. Fue el tercer gol de Messi contra un equipo argentino, y el primero en el Camp Nou.
El argentino celebró su gol con una sonrisa y un abrazo con sus compañeros, sin hacer ningún gesto hacia los hinchas de Boca, que lo aplaudieron y lo reconocieron como el mejor del mundo.
El Barcelona completó el marcador con los goles de Malcom, a los 18 minutos, y de Rafinha, a los 67 minutos, y se quedó con el trofeo Joan Gamper por sexta vez consecutiva.
Messi levantó el trofeo como capitán y recibió el cariño de la afición, que coreó su nombre y le pidió que se quedara para siempre.
El Reencuentro de Messi con Newell’s
Su cuarto y último partido contra un equipo argentino fue recientemente el 15 de febrero de 2024, en un amistoso internacional disputado en Miami contra Newell’s Old Boys. El club de sus amores, donde empezó a jugar al fútbol de niño.
El partido fue parte de la pretemporada de Inter Miami, el nuevo equipo de Messi, fichado por el club estadounidense en 2023 tras dejar el Barcelona.
El partido fue muy especial para Messi, que se enfrentaba por primera vez a Newell’s, el club al que siempre quiso volver y al que nunca pudo enfrentar con el Barcelona.
Jugó con mucha emoción e ilusión, y se lució con su juego y con su gol.
Messi anotó 1-0 a los 23 minutos, con un tiro libre magistral que se coló por la escuadra.
Fue el cuarto gol de Messi contra un equipo argentino, y el más emotivo de todos.
El argentino celebró su gol con una mezcla de alegría y nostalgia, y le dedicó un beso al escudo de Newell’s que llevaba en su camiseta.
Inter Miami ganó el partido por 2-0, con el otro gol de Gonzalo Higuaín, a los 76 minutos, y se llevó el trofeo.
Messi fue ovacionado por los hinchas de ambos equipos, que le agradecieron su espectáculo.
El argentino se fundió en un abrazo con los jugadores de Newell’s, a los que les regaló su camiseta y su cariño.
Fue un día inolvidable para Messi, que cumplió uno de sus sueños de niño: jugar contra Newell’s, quien lo vio nacer como futbolista.
El argentino demostró su amor y respeto por la Lepra, y por el fútbol argentino, al que enfrentó cuatro veces en su carrera, siempre con la camiseta del Barcelona y luego con la de Inter Miami.
Conclusión
Messi es, sin duda, uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol, y también uno de los más queridos y admirados por los hinchas de todo el mundo.
El astro argentino ha deslumbrado al mundo con su talento y magia y ha ganado todo lo que se puede ganar a nivel de clubes y de selección.
A pesar de su ausencia en el fútbol profesional argentino , Messi ha dejado una huella profunda en el corazón de su país natal.
Ha demostrado ser un jugador excepcional, pero también una gran persona, que ama y respeta al fútbol argentino, y que nunca se olvida de sus raíces.
Por eso, Messi es un ejemplo para todos los futbolistas del mundo y para todos los argentinos, que lo admiran y lo apoyan, y que esperan que algún día vuelva a jugar en su tierra.
Su influencia trasciende las fronteras de la cancha e inspira a millones de jóvenes futbolistas en Argentina y en todo el mundo.
Su legado como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos está asegurado, independientemente de dónde haya desarrollado su carrera profesional.
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