“El mundo entero hablaba de ello”, dice su inventor. “La respuesta fue una locura”. Irónicamente, uno de los partidos más aburridos de la Copa Mundial 1974, entre Países Bajos y Suecia el 19 de junio, sirvió de plataforma para una de las jugadas más hipnotizantes de su historia.
Después de que el pase de Arie Haan cayera en picado desde las nubes, sólo los pies adhesivos de Johan Cruyff retuvieron el balón. Entonces, con una mirada de soslayo y un giro supersónico, el número 14 hizo que Jan Olsson pareciese estar en una pista de hielo y protagonizó una escapada tan deportiva como la que Muhammad Ali protagonizaría contra George Foreman unos meses más tarde. Había nacido el ‘Giro Cruyff’.
“Nunca practiqué trucos en los entrenamientos”, dijo Cruyff. “Nunca. Era espontáneo. Me encontraba en una situación difícil, tenía un problema, necesitaba una solución. Se me ocurrió en el momento. Era la mejor solución”.
“No tenía ni idea del impacto que tendría”, dijo Cruyff. “Había una Copa Mundial en marcha, pasaban muchas cosas en todo el mundo, y era de lo único que la gente quería hablar”.
El ‘Giro Cruyff’ fue tan apasionante que hasta su víctima se sintió como un héroe_:”Entré en el vestuario después del partido, miré a mis compañeros y todos nos echamos a reír”
Por fifa.com
El giro y la explicación de Cruyff
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